Con este plan, la autoridad monetaria apunta a recomponer la base monetaria, fortalecer el balance del Central y sostener el proceso de estabilización iniciado tras las elecciones.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) proyecta retomar la compra de reservas internacionales en los próximos meses con el objetivo de remonetizar la economía y acompañar una esperada recuperación de la demanda de dinero tras las elecciones de medio término.
La estrategia fue presentada por el vicepresidente del BCRA, Vladimir Werning, ante un grupo de inversores internacionales, en una exposición que recién ahora se dio a conocer públicamente. El documento, disponible en inglés, describe la hoja de ruta del organismo en el nuevo escenario post electoral.
Un cambio en la política monetaria
Según el informe, el Banco Central considera que, con la estabilización financiera y el superávit externo, se abre una oportunidad para inyectar pesos mediante la compra de dólares, algo que hasta ahora no era posible dentro de la banda cambiaria acordada con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La presentación señala que la demanda de pesos se había mantenido baja por la preferencia por el dólar y las altas tasas de interés, pero que la mejora en las expectativas podría revertir esa tendencia.
“Dinero externo” y estabilidad cambiaria
Werning explicó que las fuentes tradicionales de expansión monetaria, como el déficit fiscal o el desarme de deuda, “no se encuentran disponibles”. Por eso, la inyección de pesos provendría del “dinero externo” generado por el superávit comercial y las compras de divisas.
“Al establecer el ritmo de compras de reservas para financiar un aumento proyectado en la cantidad de pesos demandados, la política monetaria puede contribuir a impulsar la liquidez externa y estabilizar las expectativas cambiarias”, señala el documento del Central.
Señal al mercado
El anuncio fue leído como una señal de confianza y normalización hacia los mercados, al mostrar que el BCRA podría volver a acumular reservas sin presionar sobre el tipo de cambio, apoyado en una mayor estabilidad macroeconómica y en la recuperación del flujo comercial.