Los últimos datos del INDEC confirman que la demanda interna sigue en terreno negativo. Caen las ventas en las principales bocas comerciales y se reconfiguran los hábitos de pago.
El termómetro del consumo volvió a marcar frío. Los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos muestran que septiembre cerró con descensos en supermercados, centros comerciales y autoservicios mayoristas, consolidando una tendencia que se profundiza mes a mes.
Supermercados: leve retroceso, pero sin señales de recuperación
En las grandes cadenas, las ventas a precios constantes retrocedieron 0,8% frente a septiembre de 2024 y bajaron 0,2% respecto de agosto. Aunque el acumulado anual todavía exhibe un avance del 2,7%, los indicadores mensuales muestran un desgaste creciente.
En valores corrientes, la facturación total alcanzó $1,96 billones, un 23,8% más que un año atrás, con un ticket promedio que llegó a $30.099 (+31,2%). Entre los rubros que más aumentaron en ventas se destacaron Indumentaria y textiles para el hogar (53,4%), Carnes (45,2%) y Alimentos preparados (35,2%).
El uso de la tarjeta de crédito volvió a imponerse como principal método de pago (44,1%), seguido por la tarjeta de débito (26,4%) y el efectivo (16,2%).
Shoppings: menos ingresos y cambios en las preferencias
Los centros comerciales tampoco escaparon al deterioro del consumo. Las ventas reales cayeron 3,4% interanual, mientras que el monto total a precios corrientes llegó a $486.913 millones (+18,9%).
Entre los rubros con mejor desempeño nominal aparecen Indumentaria y calzado (35,3%), Patio de comidas (17,8%) y Electrónicos y computación (10,3%). Aun así, el gasto ajustado por inflación evidencia la contracción del público en los pasillos de los shoppings.
Mayoristas: el eslabón más golpeado
El retroceso más marcado se registró en los autoservicios mayoristas, con una caída interanual del 13,1% y un descenso mensual del 5,2%. En los primeros nueve meses del año, el sector acumuló una baja de 7,4%.
La facturación en términos corrientes sumó $287.852 millones (+7,9%), con un ticket promedio de $36.959. Los rubros con mayores aumentos en ventas fueron Carnes (29,9%), Panadería (15,6%) y Bebidas (13,3%).
A diferencia de los supermercados, aquí predominan los “otros medios de pago” (32,9%), por encima de la tarjeta de crédito (28,3%) y el efectivo (22,7%).
