El economista Javier Timerman consideró que el respaldo financiero del Tesoro estadounidense le da oxígeno al Gobierno, pero advirtió que se trata de una ayuda “temporal” que exige cambios estructurales. “El Gobierno deberá reaccionar rápidamente después del 26 de octubre”, remarcó.
El economista Javier Timerman analizó la reciente asistencia financiera de Estados Unidos a la Argentina y destacó que el apoyo norteamericano apunta a resolver un problema de liquidez, no de solvencia.
Sin embargo, alertó que se trata de un “salvavidas” momentáneo, que el Gobierno deberá aprovechar para implementar reformas y generar confianza.
“Hay una diferencia clara entre liquidez y solvencia. Solvencia es cuando un país no está capacitado para pagar. Liquidez significa que estoy en el camino correcto, pero me quedé temporariamente sin plata”, explicó Timerman.
Según el economista, el mensaje del Tesoro norteamericano es también una validación política hacia la administración de Javier Milei:
“Considera que esta política y estos interlocutores son lo que la Argentina necesita. Pero si el Gobierno quiere seguir con las mismas políticas, tiene que generar un círculo virtuoso de inversiones privadas”.
“La historia demuestra que la ayuda tiene fecha de vencimiento”
Timerman recordó que los rescates financieros en la historia argentina suelen tener una duración limitada y que el país debe evitar caer nuevamente en la dependencia externa.
“Tenés que pensar que las cosas tienen que cambiar para que la ayuda no termine siendo algo que en seis meses nos obligue a buscar otra”, advirtió.
Además, remarcó que la política económica actual no genera los dólares necesarios y que el país arrastra un problema de productividad estructural:
“Tu política económica no generó los dólares, no los va a generar. Tenés un problema de productividad grande y una historia de defaults que erosiona la confianza”.
“El Gobierno tiene que actuar rápido después del 26 de octubre”
El economista subrayó que el respaldo estadounidense otorga tiempo, pero que el Gobierno deberá usarlo para definir cambios concretos después de las elecciones legislativas.
“Así como el Tesoro actuó rápido, Argentina también tiene que actuar rápido. Y la única forma de hacerlo es volver la moneda más competitiva, porque cualquier otra reforma lleva mucho más tiempo”, señaló.
En cuanto al esquema de bandas cambiarias, Timerman dudó de su sostenibilidad:
“La política del Tesoro es contraria a mantener bandas cuando no se acumulan reservas. Me parece más una medida temporal y preelectoral que un esquema sostenible”.