El stock de divisas fuera del sistema financiero alcanzó los u$s251.210 millones entre julio y septiembre. En la comparación interanual, el atesoramiento de dólares por parte de los argentinos aumentó más de u$s8.200 millones.
Los argentinos continúan reforzando su preferencia por el dólar como refugio de valor. De acuerdo con los datos de la Balanza de Pagos del tercer trimestre, difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), los llamados “dólares del colchón” aumentaron en u$s5.899 millones entre julio y septiembre de este año.
El informe oficial indica que el rubro “monedas y depósitos”, dentro de la Posición de Inversión Internacional Neta, alcanzó un total de u$s251.210 millones al cierre del tercer trimestre. En el período previo, el stock era de u$s245.311 millones, lo que confirma una aceleración en la salida de divisas del sistema financiero.
Más dólares fuera del sistema, pese al cambio de ciclo económico
La comparación interanual refuerza la tendencia: respecto del tercer trimestre de 2024, el volumen de dólares atesorados por residentes argentinos creció en u$s8.232 millones, ya que un año atrás el total se ubicaba en u$s242.978 millones. Gran parte de esos fondos, según analistas, se canaliza hacia cajas de seguridad o tenencia física.
El dato vuelve a reflejar la persistente desconfianza en la moneda local, incluso en un contexto de cambios en la política económica. Lejos de volcarse al ahorro en pesos o a instrumentos financieros domésticos, los hogares siguen priorizando la dolarización de sus excedentes.
Mejora de la posición externa, impulsada por activos privados
En términos agregados, la posición de inversión internacional de la Argentina mostró un saldo acreedor de u$s50.464 millones, resultado de activos por u$s483.278 millones frente a pasivos por u$s432.814 millones. Esto implica una mejora respecto del segundo trimestre, cuando el saldo positivo era de u$s38.600 millones.
La suba se explicó principalmente por el desempeño de los activos del sector privado, que crecieron desde u$s407.914 millones a u$s419.549 millones. Dentro de ese avance, se destacaron tanto las inversiones de cartera, con un incremento cercano a u$s7.000 millones, como el fuerte aumento de los dólares mantenidos fuera del sistema financiero.
Una señal desafiante para el Gobierno
Si bien la mejora de la posición externa es un dato positivo, el crecimiento del atesoramiento en dólares representa un desafío para el Gobierno. Para que el ingreso de capitales externos sea sostenible, primero deberá revertirse la falta de confianza de los propios residentes, que continúan eligiendo el dólar como principal resguardo frente a la incertidumbre económica.
