Todo comenzó un 22 de mayo de 2010. Las pizzas costaron unos US$ 20 y esa transacción marcó el inicio de una revolución financiera global.
En 2010, un solo Bitcoin apenas alcanzaba para comprar un cuarto de porción de pizza. Hoy, esa misma unidad de la criptomoneda más famosa del mundo podría pagar más de 2.600 porciones o unas 334 cajas grandes.
Así de increíble fue la valorización del Bitcoin en los últimos 15 años.
Todo comenzó un 22 de mayo de 2010, cuando Laszlo Hanyecz, un programador de Florida, Estados Unidos, realizó la primera compra registrada con Bitcoin. Pagó 10.000 BTC por dos pizzas grandes, equivalentes entonces a unos 41 centavos de dólar por unidad.
Las pizzas costaron unos US$ 20, y esa transacción marcó el inicio de una revolución financiera global.
Subió 50% la venta de inmuebles en abril y hay más crédito hipotecario
Bitcoin Pizza Day: el hito que dio origen a una celebración mundial
Desde entonces, el 22 de mayo se celebra el Bitcoin Pizza Day, una fecha icónica para la comunidad cripto que recuerda el primer uso real de Bitcoin como medio de pago. Hoy, esos 10.000 BTC equivalen a cerca de 1.100 millones de dólares, lo que permitiría comprar cerca de 200.000 cajas grandes de pizza al precio promedio de US$10 en EE.UU.
Este crecimiento astronómico convirtió al Bitcoin no solo en una reserva de valor, sino también en un símbolo del cambio hacia un sistema financiero descentralizado.
Así se compraban Bitcoins en 2010
El acceso a Bitcoin hace 15 años era muy distinto al actual. Un video viralizado por los usuarios Cryptobcncat y Healthy Pockets muestra el proceso de compra en un sitio llamado CoinPal.ndrxi.com, donde se podían obtener 10 BTC por US$ 3,60 mediante una cuenta de PayPal.
El procedimiento implicaba generar una orden, confirmar por correo y luego hacer clic en “Buy Now”. Tras unos minutos de espera, los bitcoins eran depositados en la cuenta del comprador.
Hoy, con solo abrir una cuenta en una plataforma de criptomonedas, cualquier persona puede comprar, guardar o intercambiar Bitcoin de forma rápida y segura. Además, existen wallets personales, exchanges descentralizados como Trust Wallet, y posibilidades como el staking para obtener rendimientos pasivos.
Cómo invertir en Bitcoin con bajo riesgo: estrategia DCA
Para quienes recién comienzan en el mundo cripto, una de las estrategias más recomendadas es el Dollar-Cost Averaging (DCA). Esta metodología consiste en invertir una cantidad fija de dinero en intervalos regulares, por ejemplo, US$100 mensuales, sin importar el precio del Bitcoin en ese momento.
El DCA permite:
-
Minimizar el riesgo de comprar en un mal momento
-
Aprovechar las caídas del mercado
-
Fomentar la disciplina financiera
Se trata de una forma accesible y segura de construir una posición sólida en Bitcoin a largo plazo.
Bitcoin como medio de pago global
Más allá de su uso como activo de inversión, Bitcoin también se consolida como un medio de intercambio eficiente y transparente. Al operar sin intermediarios, permite realizar transacciones globales con solo una conexión a Internet, abriendo las puertas a la inclusión financiera.
“La evolución del mundo cripto es imparable. A 15 años de la primera compra con Bitcoin, vemos un ecosistema más maduro, con opciones para todo tipo de inversores”, señala Ezequiel Riva Roure, analista de IOL Inversiones.
Y agrega: “Desde IOL trabajamos para acercar herramientas e información clara, porque el conocimiento es la clave para invertir con seguridad”.
Más allá de Bitcoin: el universo cripto sigue creciendo
Actualmente, existen más de 15.000 criptomonedas en circulación. Entre las más populares están Ethereum, Solana, Chainlink, Ripple y USDT. Millones de personas las utilizan para invertir, ahorrar o pagar, ampliando cada vez más el alcance del ecosistema blockchain.
Para invertir de forma segura, los especialistas recomiendan:
-
Aprender constantemente
-
Gestionar el riesgo con cautela
-
Evitar decisiones impulsivas motivadas por el FOMO (miedo a quedarse afuera)
Ver subir una criptomoneda puede ser tentador, pero lo fundamental es analizar si la inversión es adecuada para el perfil y la situación financiera personal.