Ve a Argentina como una oportunidad de inversión con alto potencial en Latinoamérica, a pesar de los riesgos existentes. La clave reside en una cuidadosa selección de activos en sectores con perspectivas de crecimiento, como la banca y la energía.
Bank of America (BofA) ha vuelto a destacar a Argentina como una oportunidad de inversión atractiva en Latinoamérica. A pesar de los desafíos económicos, el gigante financiero de Wall Street mantiene una postura optimista sobre los activos argentinos, basándose en “catalizadores positivos” que impulsan su potencial.
¿Por qué BofA apuesta por Argentina?
- Oportunidades en sectores clave: BofA recomienda sobreponderar activos en sectores como la banca y la energía, con Grupo Financiero Galicia (GGAL) y Pampa Energía (PAM) como ejemplos destacados.
- Sector bancario: Se espera un crecimiento en préstamos y una calidad de activos sólida que compensen las menores ganancias en títulos gubernamentales.
- Sector energético: Pampa Energía ofrece flujos de caja predecibles en dólares, con una producción de petróleo en aumento.
- Optimismo en las políticas del gobierno: BofA confía en que las reformas propuestas por la administración actual generarán un impacto positivo en la economía.
Riesgos a considerar
El informe de BofA también reconoce los desafíos que enfrenta Argentina:
- Incertidumbre política
- Alta inflación
- Debilidad cambiaria
- Controles de capital
Panorama regional
BofA también analiza otras economías latinoamericanas:
- Brasil: Sobreponderado, con potencial de crecimiento en utilidades y valoraciones atractivas. Riesgos: Inestabilidad política y fiscal.
- México: Neutral, con actividad económica robusta impulsada por el nearshoring. Riesgos: Inestabilidad política y desaceleración en Estados Unidos.
- Chile: Infraponderado, a pesar de las valoraciones atractivas y las tasas bajas. Riesgos: Retiros de fondos de pensiones e inestabilidad política.
- Colombia: Sin exposición, debido a la incertidumbre en políticas energéticas y la inestabilidad política.
- Perú: Sin exposición, por la debilidad macroeconómica y la inestabilidad política.
