El Indec informó el saldo comercial del último mes de 2022, un superávit de 1.102 millones de dólares. En todo 2022 el saldo positivo fue menor a USD 7.000 millones, la mitad de 2021.

El saldo comercial de diciembre registró un superávit de 1.102 millones de dólares gracias al desplome de las importaciones, de acuerdo con informacíón del Indec.

Durante el año pasado, las exportaciones sumaron USD88.446 millones y las importaciones, USD 81.523 millones, por lo que el intercambio se incrementó durante el año pasado 20,4% y alcanzó los USD169.969 millones.

Las ventas al exterior aumentaron 13,5%, es decir uno USD10.512 millones adicionales, como resultado de una suba del 16,2% en los precios y una reducción del 2,3% en las cantidades.

Es decir que el salto de las exportaciones está vinculado con la mejora de los precios, en especial de las materias primas agrícolas, en un año en que la invasión de Rusia a Ucrania hizo saltar el precio de las commodities.

El intercambio comercial de 2022 cerró con un superávit de USD6.923 millones, contra la ganancia de USD14.751 millones de 2021.

En un comunicado, Cancillería destacó que las recientes cifras publicadas por el INDEC de diciembre confirman el récord exportador registrado durante 2022.

Con exportaciones de bienes por USD 6.119 millones en el último mes, el año cerró con un total de USD 88.446 millones y marcó su máximo histórico.

Una vez publicados los valores de exportaciones de servicios el total exportado superará por primera vez en la historia los USD 100.000 millones, completó.

El valor de bienes exportados en 2022 se incrementó 13,5% interanual y superó en más de USD 5.400 millones al anterior récord alcanzado hace más de una década, en el año 2011, y en más de USD 23.300 millones al valor exportado en 2019.

Cepo a importadores

“Los holgados resultados observados en los últimos tres meses del año tienen su impulso en la contracción del nivel de importaciones, las cuales pasaron de USD8.664 millones en junio a USD5.017 millones en diciembre (-USD 3.647 M respecto al pico)”, consignó un informe de la consultora LCG.

Esta contracción fue resultado de menores necesidades de adquirir GNL después del paso del invierno y a las trabas e impedimentos burocráticos para importar, producto de una necesidad de cuidar el volumen de reservas existentes.

Actualmente varios sectores productivos continúan con problemas, encendiendo alarmas respecto a la situación productiva si no se obtienen los bienes necesarios para continuar con la actividad.

Por eso, la decisión de desviar reservas a la recompra de deuda encuentra en estas empresas a los principales detractores, asumiendo que el ajuste podrá intensificarse este año, completó LCG.

Balanza comercial en 2023

LCG consideró que 2023 planteará un escenario distinto al observado durante todo 2022.

Se espera que las exportaciones continúen en niveles relativamente elevados, pero se observará una merma que actualmente estimamos en unos USD8.000 millones, producto de las condiciones hídricas extremas en la zona núcleo del país.

El principal impacto negativo vendría de la mano del trigo y continuaría por la soja. El impacto podría superar los USD11.000 si la situación no se revierte, o se agrava, en el futuro inmediato.

Dada la disminución de divisas derivada de las exportaciones, los controles sobre las importaciones se sostendrán e incluso podrían profundizarse. Sin margen de maniobra este recorte continuará teniendo consecuencias negativas directas sobre los precios y el crecimiento de la actividad.

LCG espera exportaciones en torno a los USD81.000 M (-8,1% anual) e importaciones en unos USD77.000 M (-5,5% anual), resultando en un superávit en torno a USD4.000 M.